lunes, 26 de agosto de 2013

Pasar página.

Nunca me gustaron los finales,
eso siempre implicó una despedida para mí; el último capítulo de un buen libro, el último día de verano, separarte de una buena amiga, despedirse de un caballo...
Pero eso es lo que nos hace fuertes, los que nos hace ver por lo que tenemos que luchar. Las despedidas son inevitables...
De algún modo ellos siempre estarán ahí, serán el susurro del viento,...el césped que crece en el campo,... el sol que se pone,...la arena de la playa,...esa voz de nuestro corazón,...ese recuerdo,...ese pensamiento...Ellos siempre serán las estrellas que iluminan el cielo por la noche, cuando todo parece oscuro y solitario...
A pesar de haber pasado la página, a pesar de que el verano ya sea cosa del pasado, a pesar de haberme despedido, eso no implica que no los recuerde, que no los sienta y por supuesto, que no los siga queriendo...

Cuídate, cuidale.


El caballo, el mejor amigo que puedes tener si le respetas, si le amas, si le cuidas...
El caballo, un amigo fiel, un amigo leal, un amigo por toda la vida...
Si tienes la suerte de estar junto a él, o incluso poder compartir experiencias con él; cuidale, y el cuidará de ti.